Conocida como la planta de la inmortalidad, en el antiguo Egipto, solía utilizarse en los ritos de enterramiento y en el embalsamiento de los faraones, pero en vida también podia hacerse uso de sus milagrosos efectos y así, llegó a afirmarse que la exuberante belleza de las reinas Nefertiti y Cleopatra tenia mucho que ver con el hábito de bañarse en el jugo de esta planta, se la ha dado en llamar «la plata bíblica» por las numerosas ocasiones en que aparece mencionada tanto en el antiguo como en el nuevo testamento, donde entre otras cosas, se relata como Nicodemo utilizó una mezcla de Aloe y Mirra para embalsamar el cuerpo de Jesús, (Evangelio de San Juan). al dios Ball-Zebut se le representaba como símbolo de la inmortalidad, de su poder regenerador de la vida. En la India donde la denominaron «la curadora silenciosa» creian que el Aloe crecía en los jardines del Edén dadas sus propiedades sobrenaturales.
Para quienes la utilizan, ver y sentir los resultados de La Pomada del Silencio, es motivo suficiente para creer en ella.
El Aloe Vera es la planta con más propiedades curativas del mundo. Los estudios han demostrado que el Aloe Vera incluye sustancias inorgánicas como la glucosa, proteinas, triglicéridos y ácido salicílico, también está demostrado que contiene vitaminas A, B1, B2, B6, B12, C y E.